Ferrocarril rético (Rhätische Bahn)

El ferrocarril rético, con sus rutas declaradas desde 2008 Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO, es una obra maestra de la ingeniería y el trazado. En Samedan, en el cantón de los Grisones, coinciden cuatro líneas del ferrocarril rético, formando así el centro del tráfico ferroviario de Oberengadin. Para utilizar el cruce ferroviario Sper l’En en Samedan y crear una separación entre la carretera y la vía, las autoridades locales hicieron hundir la vía ferroviaria hasta cinco metros.

Los retos

El tramo de 420 metros: Una parte de 288 metros es de losa continua, de los cuales 100 metros se encuentran en un túnel.
La ubicación elevada de la localidad de Samedan: 1700 metros sobre el nivel del mar
Condiciones geológicas extraordinarias: el túnel y el surco se encuentran en aguas subterráneas
Temperaturas de hasta 30 grados bajo cero Celsius en los meses de invierno

La solución de Getzner

El ferrocarril rético se utilizó por primera vez como losa continua, con ejecución de losa flotante: Una especie de cuba de 288 m de longitud ubicada en las aguas subterráneas constituye el elemento esencial del tramo hundido. Esta cuba se transformó en sistema de losa flotante distribuido en toda la superficie.

Para cubrir el desagüe de la superficie se instalaron canaletas laterales y cuatro pozos de bombeo, de los cuales dos se calientan durante los meses de invierno. Como complemento, Getzner añadió bandas de mantas de drenaje sobre toda la placa de vía en la zona angular para el agua que pudiera penetrar a través de las fugas. Ambas medidas permitieron disponer de un sistema de desagüe completo controlado del sistema de losa flotante.

©Rhätische Bahn - Tibert Keller

Ventajas para el cliente

Mejora sostenible de las condiciones del hábitat
Protección más eficaz contra las sacudidas y el sonido transmitido por sonora estructural
Protección contra las sacudidas de alta eficacia a 1700 metros sobre el nivel del mar
Aislamiento elástico eficaz en condiciones climáticas extremas
Mantas elásticas bajo la grava para ajustar la rigidez del balasto en las zonas de transición

Lo más importante para nosotros durante la fase de implantación del proyecto fueron los amplios conocimientos y experiencia de los expertos de Getzner. Por un lado realizaron los cálculos de las placas de aislamiento para el sistema de losa flotante así como para las zonas de transición y, por otro lado, proporcionaron una solución que cumplía con los estrictos requisitos antivibratorios que exige el pliego de condiciones de IFEC.